martes, 14 de octubre de 2008

Que la crisis la paguen Bush y los empresarios

La crisis económica desatada en los Estados Unidos y en Europa ya dejó a millones de personas sin viviendas y sin trabajo.

Bush y los jerarcas de las 7 potencias imperialistas, en vez de preocuparse por los trabajadores de sus respectivos países, se reunieron para socorrer a los banqueros, utilizando para eso el dinero de las finanzas públicas, descargando la crisis que provocaron los ricos sobre las espaldas de los que menos tienen.

La crisis es el resultado de años de enormes e inimaginables ganancias, producidas por la super explotación de millones de trabajadores y el saqueo de los recursos de la mayoría de los países del mundo; ganancias que en vez de volcarse a la producción han sido derivadas a la especulación, el consumo suntuoso y la timba de las bolsas.

Sin embargo esta crisis es además el producto directo de la lucha de las masas de todo el mundo, que salieron a enfrentar los planes de explotación y saqueo, como por ejemplo la resistencia del pueblo iraquí, que hizo retroceder la ofensiva militar imperialista, las huelgas de los trabajadores europeos, como la que acaba de explotar en Bélgica, las movilizaciones de los inmigrantes en Europa y EE.UU., las batallas de los pueblos latinoamericanos que derribaron los gobiernos neoliberales de los años noventa, etc.

Cristina Kirchner, a los pies del imperio…

Frente a la crisis, Cristina Kirchner declaró que “Argentina tiene reservas y estamos en condiciones de enfrentar el temporal”.

Sin embargo, en vez de utilizar esas reservas para aumentar los salarios, defender el empleo e invertir en la industrialización del país, lo primero que hizo fue viajar a los EEUU para, metiendo mano en esos fondos, socorrer el corazón enfermo del capitalismo yanqui, ofreciéndoles 6.700 millones de dólares al Club de Paris, y cerca de u$s 20.000 millones más al City Bank y demás bancos en crisis.

Cristina se arrodilla ante Bush, pero niega el aumento de $500 que le pidió Moyano y la CGT.

Lamentablemente Hugo Moyano, salió a pedir a los trabajadores que “no hagan olas”, declarando que “debemos analizar cómo equilibramos los efectos de esta situación mundial para que no se produzcan despidos” y que “¡el salario deberá esperar el momento oportuno!”.

Moyano: ¡El salario obrero no puede esperar!

Para Moyano, $500 no significan nada. Por esa razón repitió como un loro lo expresado por el presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), quien momentos antes se había reunido con la presidenta para pedirle que rechace el reclamo de aumento de los $500.-

Mientras nos niegan un mísero aumento y los dirigentes nos piden que no “hagamos olas”, la General Motors Argentina, Iveco, Fiat Córdoba y varias fábricas importantes ya han salido a suspender a miles de obreros y preparan las listas de los futuros despidos.

En la UOCRA se están paralizando las obras, el crédito se cortó y continúan los tarifazos en los peajes, la luz y el gas, mientras que la Presidenta trata de ocultar que un desastre se avecina para los trabajadores y el pueblo.

En las fábricas, oficinas, escuelas, universidades y empresas debemos impulsar reuniones y asambleas para levantar la guardia y pelear para que la crisis la paguen los que la provocaron.

En esas reuniones y asambleas debemos exigirle a los dirigentes que convoquen a plenarios de delegados y reuniones de coordinación que voten medidas de lucha para defender los puestos de trabajo y el salario; preparándonos para pasarlos por encima sino se ponen a la cabeza del reclamo.

Defendamos el salario, los puestos de trabajo y luchemos por un Plan Obrero de Emergencia

Aumento de salario de emergencia de $500 al básico. Reapertura de las paritarias y 82% para jubilados. Prohibición por ley de despidos. Que se repartan las horas de trabajo con salario pleno sin suspender ni despedir a nadie. Expropiación sin pago y nacionalización de toda empresa que suspenda, despida o cierre.

Así como los patrones y los gobiernos patronales se reúnen para hacerle pagar la crisis a los trabajadores, la CGT y la CTA tienen que convocar a un congreso de delegados de base que resuelva un Plan Anticrisis de los Trabajadores, en el cual los socialistas propondríamos medidas como las siguientes:

* Un Plan de medidas obreras alternativas, que frene el saqueo de los recursos y ponga las enormes riquezas que tiene el país en manos de los trabajadores y el pueblo para que se distribuyan equitativamente

* Nacionalización de la banca, bajo control de de los trabajadores y del comercio exterior, para evitar que las divisas se vayan del país y garantizar que se inviertan en la producción y en un Plan Nacional de Obras Públicas que de trabajo a los millones de argentinos que aún están desocupados.

* Suspensión inmediata del pago de la deuda externa y llamado a los pueblos de Latinoamérica a unirse por el no pago, para aumentar los presupuestos de Educación, Salud, Servicios elementales y construir miles de viviendas en todo el país.

* Nacionalización y Estatización del petróleo, el gas y de todos los recursos naturales. Que esos miles de millones de ganancia de las multinacionales queden en manos del Estado, controlados por los trabajadores de las empresas.

* Reducción del IVA y eliminación del impuesto a las Ganancias para los trabajadores. Aumento de impuestos a los grandes empresarios y a los ricos.

* Solución al reclamo de los pequeños productores agropecuarios, garantizándoles precio mínimo y sostén y créditos blandos para comprar maquinarias y mantener la producción. Expropiación de los latifundios para darles esas tierras a los campesinos y peones rurales dispuestos a trabajarlas en el marco de un plan nacional agropecuario.

Convergencia Socialista (CS),
Izquierda de los Trabajadores (IT)
Frente de Unidad de Revolucionario (FUR)


En el Comité de Enlace CS, IT, FUR, LC, 14 de Octubre de 2008


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