miércoles, 17 de octubre de 2012

Triunfo de Chávez en Venezuela: ¿Quién ganó...?

Con Chávez ganaron las multinacionales

La crisis del sistema capitalista continúa haciendo estragos en todas las economías -incluso las imperialistas- golpeando más duro a los menos pudientes. Por esto, los economistas burgueses más optimistas y el propio FMI admitieron que el retroceso no se detendrá, por lo menos hasta 2015.

La recesión hace estragos en Europa y no se advierten signos de reactivación en EE.UU., combinándose con la caída de la demanda mundial y el desaceleramiento de la economía de China, uno de los países que venía jugando el papel de “locomotora” del sistema.

Los jerarcas capitalistas decidieron intensificar sus políticas de ajuste, para que los platos rotos, como siempre, los paguen los explotados. Con el imperialismo estadounidense a la cabeza, todos los gobiernos, más allá de sus contradicciones, se alinearon en esta cruzada antiobrera y antipopular.

Para eso, los yankys no solo cuentan con el apoyo de los personajes más reaccionarios; tienen también a otros, que diciéndose de izquierda o “nacionalistas”, -como los Castro en Cuba o Chávez en Venezuela- ayudan a desmovilizar a las masas, engañándolas con discursos populistas y mentiras.

Por eso, desde la Corriente Revolucionaria Internacional, denunciamos que Chávez no ganó para profundizar el camino hacia el “Socialismo”, ni para ponerle palos en la rueda a los planes de Ajuste y Saqueo del imperialismo. Continuará actuando dentro del frente contrarrevolucionario mundial, cubriendo “por izquierda” las políticas de derecha que él mismo aplica.

El comandante bolivariano aplica un plan que bien podría adoptar su contrincante de derecha, Capriles, defendiendo los intereses de las grandes petroleras yankys, como Chevrón, dueñas de los pozos más rentables, como los de la Cuenca del Orinoco.

En Venezuela no se avanza hacia el Socialismo ni se aplica una política antiimperialista, como el propio Chávez admitió apenas terminaron los comicios, diciendo que “no pretendía tocar la propiedad privada”.

Con el barril de petróleo a $106 dólares, mantiene una política de subsidios para controlar a los sectores populares, dándoles algunos beneficios, pero sin cambiar la situación general de miseria y explotación.

Su triunfo no cambia el hecho de que los trabajadores del Estado (empleados públicos, salud, industrias básicas) tienen sus contratos colectivos vencidos entre cuatro y cinco años. Que los obreros de la acería estatal Sidor o del cemento aún no firmaron su contrato.

Los obreros petroleros tienen un salario promedio de 300 dólares,  mientras que PDVSA sigue expuesta a nuevas tragedias como la explosión de Amuay por falta de mantenimiento. Venezuela se cae a pedazos, en medio de una enorme desigualdad social.

Pero el papel de Chávez dentro del frente contrarrevolucionario mundial es aún más siniestro, ya que utiliza su prestigio para frenar o traicionar luchas y revoluciones, como en Libia, apoyando al dictador Gadafi o en Siria, sosteniendo al genocida Al Assad.

Por eso no es casual que apenas triunfó llamó a apoyar a Cristina Kirchner, que en Argentina está enfrentando un proceso de luchas obreras y populares que cuestionan su liderazgo.

Tan reaccionaria es su política internacional, que está tejiendo un acuerdo estratégico con el presidente de Colombia, encarando juntos una negociación para desarmar a las FARC, a cambio de nada que favorezca al pueblo de ese país o a las propias FARC.

Previo a las negociaciones, junto a los presidentes de Ecuador y Brasil, les cerraron las fronteras a los combatientes, aislándolos política y militarmente.

Desde la Corriente Revolucionaria Internacional, integrada por CS de Argentina y el Movimiento Revolucionario de Brasil, llamamos a romper con la política de Chávez y sus seguidores y a construir una política revolucionaria.

Nos mantendremos en el campo de la oposición de izquierda, sin ningún apoyo político a este gobierno, amigo de los trabajadores en las palabras pero enemigo en las acciones y prácticas. Igualmente, seremos opositores de la vieja derecha, liderada por Capriles, que representa lo mismo de Chávez, contra los trabajadores.

Impulsamos la acción directa y un programa obrero, campesino y popular, que implica la expropiación sin pago de las empresas en Venezuela y el control efectivo del poder por parte de los trabajadores, a través de sus organismos sindicales, barriales y de lucha.

¡Sólo habrá Socialismo cuando se expropie a los capitalistas mediante un gobierno de los únicos interesados en hacerlo: los trabajadores y los pueblos de Venezuela y de todo el continente!

Corriente Revolucionaria Internacional


Corriente Revolucionaria Internacional 
(CS de Argentina y MR de Brasil)

No hay comentarios: