viernes, 25 de diciembre de 2015

Todo el apoyo a la heroica resistencia siria, kurda y palestina

El pueblo kurdo de Diyarbakir enfrentando a la policía y el ejército de Erdogan

Las fuerzas represivas del presidente Erdogan continúan atacando a decenas de ciudades y aldeas en el sudeste de Turquía, cuya población es mayoritariamente kurda, asesinando a hombres, mujeres y niños con la excusa de “combatir al terrorismo”.  
Las barriadas populares de Sur en Diyarbakir, Silopi, Cizre, Mardin o Nusaybin son algunos de los lugares en donde rige el estado de sitio, impuesto por el gobierno para amedrentar a las masas kurdas que luchan por sus derechos y masacrar a su vanguardia.
Mientras tanto, las potencias occidentales -embarcadas en una supuesta guerra contra ISIS- Israel, Egipto, el zar Putin, los jeques de los países del Golfo y los ayatollahs “antiimperialistas” de Irán miran para otro lado, dejando actuar al jefe del Estado Islámico el carnicero Erdogan.
Aunque se pelean entre sí, todos coinciden en aplastar al heroico pueblo kurdo, que viene de derrotar a los mercenarios del Estado Islámico en Kobane y Tal Abyad, consolidando el gobierno de los cantones de Rojava.
Por eso, no es casualidad que el islamita Erdogan acabe de anunciar que “Israel es el gran amigo de Turquía” y que las tropas de ISIS no hayan disparado todavía contra sus pares del ejército sionista, de cuyas entrañas proviene su jefe máximo, el “Califa” Abu Bakr al Baghdadi.
Las contradicciones en el interior del Frente Contrarrevolucionario -integrado por el imperialismo, Arabia Saudita, Israel, Turquía, Siria, Iraq y los países del Golfo- son enormes, a tal punto que existe una guerra en la cual todos combaten contra todos.
Sin embargo su instinto contrarrevolucionario prevalece, razón por la cual todos apuntan sus cañones contra las masas insurreccionadas kurdas, palestinas y sirias, apoyando o dejando actuar a crigenocidas de la talla de Bashar Al Assad, Erdogan y Netanyhau.
Los revolucionarios debemos solidarizarnos de manera activa con los pueblos que combaten a estas dictaduras, ubicándonos en la trinchera de los kurdos, palestinos y sirios que luchan contra sus respectivos gobiernos y las bandas contrarrevolucionarias, como ISIS o Al Qaeda.
Desde ese lugar, que es de principios, tenemos que proponer la única salida de fondo para Medio Oriente: la Federación libre de Estados Obreros y Socialistas, que garantice la paz, expropie a los capitalistas y se transforme en un faro que ilumine a las masas de todo el mundo.

No hay comentarios: